11/19/2015

Recordando el espiritu del común con una balada



Introducción


Recientemente se ha publicado "El común catalán: la historia de los que no salen a la historia", un libro escrito por el historiador independiente y autodidacta David Algarra. La obra trata sobre la historia de Cataluña, prestando especial atención a la Edad Media y adentrándose en varias cuestiones que la historiografía dominante menudo ha menospreciado, distorsionado y ocultado, a saber: las raíces populares de la sociedad catalana, la comunidad de bienes y el comunal, el autogobierno popular a través de las Universidades (asambleas vecinales), las solidaridades y las costumbres de ayuda mutua, los efectos devastadores de la revolución liberal y la resistencia popular para con la misma ... Estamos hablando, así pues, de una aportación historiográfica de notable valor divulgativo, compendiador y revelador; una obra que puede resultar interesante para las personas que quieran seguir aprendiendo sobre el desarrollo histórico popular, en general, y sobre la cultura catalana, en particular.

Goethe decía que "quien no sepa dar cuenta de al menos 3000 años de historia está condenado a la miopía del día a día", y yo añadiría que esta aflicción puede resultar especialmente aguda en tanto que ignoramos la historia de nuestro entorno más próximo. Hoy, cuando está en boga hablar de la liberación y la autodeterminación de Cataluña, y cuando, al mismo tiempo, las élites políticas españolas parecen querer conducirnos hacia callejones sin salida, caso, tal vez más que nunca , estudiar profundamente la historia de Cataluña; pero no aquella que enseñan los centros educativos y culturales regidos por las administraciones estatales -ya sean autonómicas o centrales- ni aquella que brota de instituciones mercantiles. Esta historiografía, la historiografía dominante, es, generalmente, la historiografía de la dominación. Conviene, más bien, que atendamos a la clase de historiografía que recomienda Simone Weil: "Frente a la historia oficial, que es la protagonizada por los vencedores, valedores del poder y de la fuerza, hay que buscar los vestigios de otra historia escondida y silenciosa, la de las víctimas y los perdedores, hay que "leer en la historia el silencio de los vencidos". Esta es la aventura intelectual y sentimental que nos propone el compañero David Algarra en "El común catalán".

Hace unos meses David me invitó a escribir una contribución para su libro y asumí el reto con mucha alegría. El resultado es un epílogo (pendiente de traducción al castellano) que presenta la balada "El mundo se dio la vuelta", de la que hemos hecho una adaptación lírica y versión musical que puede escuchar y descargar.

Saludos cordiales,

Blai